La cultura del ahorro no es algo que suele estar presente en muchas personas, ya sea porque nunca lo aprendieron o por las pocas posibilidades de la gran mayoría de la población por guardar algo de dinero.
La buena noticia es que, nunca es demasiado tarde para comenzar, y a pesar de que no es algo fácil, este puede ser el momento adecuado para iniciar.
Te dejamos acá 10 consejos a tomar para incrementar o arrancar con nuestros ahorros:
- Revisar el estado de nuestras finanzas y retomar el control.
Debemos hacer una revisión a profundidad de nuestras finanzas personales y familiares. Revisar nuestros estados de cuenta, fondos de ahorro, deudas, últimos gastos que hemos hecho y hasta el dinero bajo el sillón o en los bolsillos del pantalón. Esto nos ayudará a plantear nuestra realidad económica, un punto de partida y fijar metas de ahorro a corto, mediano y largo plazo. - Ponerse al día con las deudas.
Ya sean deudas personales, con proveedores o con nuestro banco, es tiempo para que establezcamos cuánto debemos y en cuánto tiempo lo podemos pagar para quitarnos ese peso de encima. - Establecer gastos fijos y variables.
Para comenzar a ahorrar, es importante que determines de manera correcta cuáles son los gastos y obligaciones que inevitablemente debemos cubrir y cuáles son innecesarios.
Debes considerar gastos fijos como el pago de alquiler, alimentos y servicios básicos del hogar, y comenzar a tapar aquellas fugas de dinero no esenciales, como comer en restaurantes, así como calcular el ahorro que podemos generar al hacer estos recortes. - Comenzar por pequeñas cantidades.
Muchas personas no están acostumbradas a ahorrar y seguramente les resultará complicado, por ello es recomendable empezar por tratar de ahorrar cantidades pequeñas. Una vez alcanzada esta meta, podremos aumentar paulatinamente los montos. - Crear un fondo de emergencia y otro para metas.
Fondo de emergencias: Será para tener ahorros en caso de un imprevisto o emergencia como desempleo, enfermedad o accidente, por lo cual nunca deberemos tocar este dinero a menos que sea realmente necesario.
Fondo para objetivos: Será para aquellas metas que nos propongamos, como comprar algún producto, vacaciones, reparaciones de la casa, etc. - Considerar cambio de proveedores.
Si existe una mejor oferta en el mercado en cuanto a los servicios tales como el internet, tv por cable, telefonía y otros, es recomendable que tomemos en cuenta la posibilidad de cambiarlos. - No abusemos de las compras en línea.
No debemos abusar de los pedidos en línea, ya que en muchos casos no son productos completamente esenciales, por lo que debemos evitar caer en ofertas o compras innecesarias por aburrimiento o porque tenemos dinero de sobra. - Reclamar devoluciones de cancelaciones.
Recordemos cancelar y pedir la devolución de todos aquellos servicios que hemos suspendido por fuerza mayor, tales como el gimnasio, clubes, eventos, etc.
Estamos en todo nuestro derecho y se nos debe devolver los meses restantes de nuestra suscripción. - Moderar gastos en la casa.
Puede dar la impresión de que quedarnos en casa reducirá los gastos automáticamente; sin embargo, si no somos cuidadosos, el resultado puede ser todo lo contrario.
Esto se debe porque al pasar más tiempo en el hogar comenzamos a usar por más tiempo ciertos aparatos o servicios de manera innecesaria, lo que puede elevar nuestra cuenta de energía eléctrica, agua, internet y mucho más. Por ello debemos moderar el uso de electrodomésticos y establecer horarios fijos para las comidas, baño, ver televisión, etc. - Contratar un Seguro.
Si está dentro de nuestras posibilidades, contratar un seguro de auto, vida o gastos médicos mayores es la mejor decisión en favor de nuestra economía.
De esta forma tendremos un respaldo económico ante cualquier situación adversa que llegue a presentarse.