Feng Shui
El Feng Shui es una filosofía china, un sistema que permite acomodar tu espacio y orientarlo de tal forma que fluya con tu energía.
De manera literal significa ‘viento y agua’, que son dos elementos vinculados de manera importante con la buena salud en la cultura china.
Para empezar a poner en práctica debes seguir los siguientes puntos:
- No Acumular: deshacernos de aquello que realmente ya no utilizamos o queremos. El peor enemigo del feng shui es acumular.
- Sé minimalista: quédate con lo ‘mínimo’, aquello que realmente necesitas y que te va a ser útil.
- Arregla lo que se rompe: Asegúrate de reparar todo lo que no funciona, la energía positiva vendrá a ti y a tu hogar.
- Ventanas abiertas: Puede ser obvio, pero el aire fresco y renovado a diario ayuda a que la energía fluya a tu alrededor.
- Aprovecha el sol: La luz natural del sol promueve la buena energía, aprovéchala siempre que puedas.
- Rodéate de plantas: Un buen toque verde que purifique el aire, luzca bonito y relajante visualmente. Debe ser completamente natural. El feng shui no permite plantas artificiales.
- Adornos: Opta por un jardín zen o una estatuilla de Buda, por ejemplo. Lo importante es que los adornos guarden la regla número uno (menos es más) y los elijas con el corazón.
- Colores: Puedes darle color a tu hogar, lo único que hay que tener en cuenta es el efecto que genera cada tono.
- Entrada: El feng shui de tu casa empieza en la puerta de tu hogar. Es la entrada principal de energía y debe estar siempre ordenada, con buen olor, buena imagen y en perfecto equilibrio.
- Habitación: Es un lugar sagrado. La trinidad de esta técnica milenaria China tiene muy en cuenta tu cuarto, tu cocina y tu baño. La cama es un puntos clave de la casa y donde debes descansar como. La cabecera de la casa debe ser de madera natural. ¡Evita el metal a toda costa!
- Colchón: Lo más importante de tu colchón es que te sientas cómodo, que promueva tu fase REM profunda y tu relajación. No compres o utilices un colchón de segunda mano.
- Cama: La cama debe tener una altura adecuada respecto al suelo para que la energía pase por encima y por abajo. Evita, en la medida de lo posible, las camas con sistema de almacenaje. Pueden interrumpir el flujo de energía constantemente.
- Armario: Es vital mantener tu armario organizado, con espacios visuales libres y a tu gusto.
- Garaje: Es otra parte esencial de la casa que debes cuidar como si durmieras en ella.
- Ático: Intenta mantener los espacios recogidos y limpios al máximo.
- Sótano: Cuando pensamos en un sótano pensamos en oscuridad y suciedad encima… ¡Que no sea así! Baja y organiza todo.
- Espacio exterior: No hay nada más feng shui que un jardín bien cuidado o cultivado, donde se respire la tranquilidad y la organización.
Con estos consejos que te hemos dado, ya puedes replantearte tu hogar y tu vida.